La Inteligencia artificial es incapaz de crear la experiencia vivida en la NOCHE de las IGLESIAS el 18 de octubre.
La paz, serenidad abrazaron a cada uno de los visitantes, pues el SILENCIO deseaba entrar en su corazón, solo así era posible escuchar la presencia de la BELLEZA SAGRADA.
Las calles de Sencelles y Biiniali eran testigos de ese caminar silencioso de quienes visitaban sus iglesias parroquiales.